Cada 3 de marzo se celebra en todo el mundo el Día de la Naturaleza para concienciar acerca del valor de la fauna y la flora salvajes. ¿Quieres conocerla, disfrutarla y respetarla más? Aquí tienes cinco espacios naturales en Madrid para vivir actividades en la naturaleza.
Las cárcavas de Patones: un capricho de la naturaleza
Si quieres asombrar a tus amigos, llévalos a este mágico lugar donde la naturaleza nos ha regalado este capricho gracias a la erosión de la lluvia en las blandas tierras arcillosas. Se puede llegar desde Alpedrete de la Sierra en una cómoda ruta a través de campos o desde el Pontón de la Oliva, donde el aparcamiento suele ser escaso por la afluencia de escaladores. Acercaos a la presa del Pontón, edificada en 1857 y que aún se usa puntualmente para prevenir inundaciones. Desde el balcón de la presa veréis a los escaladores subiendo los muros de piedra que encajonan el río Lozoya.
Después de la excursión os habéis ganado una Mahou y unas raciones. Las podéis tomar en el bar Manolo, en Patones de Abajo, lugar de reunión y descanso de los escaladores. Con la calma de la cerveza y el reposo, podéis completar el plan visitando algunos de los pueblos más bonitos de Madrid. Estáis muy cerca de Patones de Arriba, Torrelaguna y Talamanca del Jarama. Senderismo, Mahou y pueblos con encanto. ¡Menudo día! Tus amigos te van a hacer la ola.
Ruta: desde el Pontón de la Oliva – Desde Alpedrete de la Sierra
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Hayedo de Montejo: un viaje en el tiempo
La Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón guarda y protege a esta joya de la naturaleza. Es Patrimonio de la Humanidad y un ejemplo de cómo era la sierra de Madrid tras la última glaciación: un vergel húmedo y boscoso. Las visitas están limitadas y es obligatorio seguir las sendas marcadas. Haz con tiempo la reserva y lleva a tus amigos o a tu pareja a uno de los hayedos más al sur de Europa, un bosque para pasear relajado y sentir los colores, olores y sonidos de la naturaleza. Las épocas más bonitas son el otoño, con sus colores ocres, y el verano, cuando buscamos un lugar fresco en los días más cálidos. Estáis muy cerca de La Hiruela, uno de los pueblos más bonitos de Madrid. Una Mahou para completar un “día zen” y regreso a Madrid para disfrutar de la noche. ¡Planazo!
Ruta: Senda del Río del Hayedo de Montejo
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La Fuenfría: el mirador que inspiró a los poetas
Muy cerca de Cercedilla encontramos otro precioso rincón de la naturaleza en Madrid. En el Centro de Visitantes de Las Dehesas os facilitarán este mapa con varias rutas. Están marcadas con círculos de colores en los árboles. Sólo hay que elegir una, fijarse en los árboles y seguir su color. La naranja es fácil y ofrece unas espectaculares vistas sobre todo el valle. Además, nos conduce al mirador donde encontraron la inspiración poetas como Vicente Aleixandre o Luis Rosales. Antes de llegar al mirador hay un cartel que indica un breve desvío a la Ducha de los Alemanes, una pequeña y curiosa cascada.
Si buscas otros planes en la naturaleza, muy cerca del aparcamiento de Las Dehesas está Aventura Amazonia, el mayor parque de aventuras de España con 33 tirolinas y 7 circuitos por los árboles con 114 juegos. Otra opción es darse un baño en las piscinas naturales de Las Berceas. Y de regreso a casa, ¿qué tal una paradita para reponer fuerzas con unas Mahou y una merecida cena con los amigos? En Galapagar están El Figón y La Santina y en Torrelodones el All Inn. ¡Elige el que más te guste!
Rutas: Las Dehesas, ducha de los Alemanes, Mirador de los Poetas – Las Dehesas a Fuenfría por el Camino Viejo de Castilla
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Peñalara y sus lagunas glaciares: la cima de Madrid
¿Te animas a subir a la cima más alta de Madrid? Está en el Parque Nacional de Guadarrama. A ver cuántos amigos se unen a tu plan montañero. En el puerto de Cotos está el Centro de Visitantes, donde os facilitarán toda la información. De ahí parte una pista forestal y tan solo hay que seguir su zig-zag hasta la cima. Eso sí, son 600 metros de desnivel y hay que llevar calzado y ropa adecuada ya que vamos a alcanzar los 2.428 metros de altura.
Las vistas recompensan el esfuerzo: a un lado, todas las cimas de la Cuerda Larga y el valle de Rascafría. Al otro, La Granja de San Ildefonso a vuestros pies, como si fuera una maqueta en miniatura. Más lejos se reconoce la ciudad de Segovia por su catedral. Junto a vosotros, seguramente, alguna cabra montesa buscando comida. Cierra esta excursión a lo grande con unas Mahou en la centenaria Venta Marcelino. No dejéis de probar sus míticos judiones de La Granja. Con las vistas de su terraza todo os sabrá mejor.
Ruta: Cotos a Peñalara por las zetas – Cotos a Laguna Grande de Peñalara por Refugio Zabala
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Dehesa de La Villa: un bosque en pleno Madrid
Uno de los mejores sitios para visitar la naturaleza en Madrid es este parque urbano. Muchos de sus árboles son centenarios ya que la zona se replantó con pinos entre 1890 y 1920. Destaca el Pino Rey, incluido en el catálogo de árboles singulares de Madrid. Además, la Dehesa de la Villa guarda muchas historias y curiosidades: fue frente de batalla en la Guerra Civil y quedan restos de trincheras; alberga el Cerro de los Locos, lugar de reunión de toreros, boxeadores y artistas de circo a principios del siglo XX; e, incluso, tuvo durante muchos años una pequeña parte del bosque vallado por contaminación radioactiva, ejemplo de lo poco que hemos cuidado la naturaleza en tiempos pasados. Para completar el paseo con una ronda de Mahou con los amigos, te recomendamos la zona de Cuatro Caminos. Ahí están el Esgo, Las Toreras y El Jefe Travelling.
Ruta: Guía de la Dehesa de la Villa. Ayuntamiento de Madrid
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